- No lo entiendes...- dijo la niña.
- Pues no, no lo entiendo.- le contestó el niño algo molesto.
- Mal, Víctor... ¡mal! ¡Eso no fue lo que el chico del parque le dijo a la chica!
- Bah, pero si no se dijeron más que mentiras.
- Es verdad... entonces, ¿qué hacemos?, ¿jugamos con lo que oímos o nos lo inventamos?
- Vamos a jugar a otra cosa, anda.
Lo peor de todo es que se creyeron sus mentiras.
Falacias edulcoradas y después el olvido.
:))) diálogo realista!
ResponderEliminarno dejemos que las cosas bonitas vayan al olvido ^^
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